sábado

Es genial como los sentidos se agudizan, te atacan. Es otra cosa. Si, te atacan. No uso en vano las palabras. Los estimulos, los colores, los olores, las lineas de expresión, están para que sean atacados, porque afloran para que podamos sentirlos, lo que nos queda, lo que está para que los retengamos, los hagamos nuestros. Los sentidos atrapan, sacuden nuestra capacidad de percepción al mismo tiempo que a nuestro cuerpo. Cuerpo mas caliente (porque siente, similar a cuando hacemos el amor). Nos amamos en nuestro sentidos. 
Parece como que los sentidos serian una parte distinta en este escrito. Se disfrazan. Encontre la respuesta un momento despues, veras: es necesario tomarse el tiempo para PENSAR. ¿Cuanto tiempo te tomas en pensar? ¿Cuanto tiempo te toma la disponibilidad? ¿Cuanto tiempo te tomas en tomar el tiempo que gastas, en ordenarlo? Merecemos ser libres de una vez y para siempre. Que lo demas no importe nada. ¿No te preguntaste nada nunca? Ayuda ante la pregunta, nos ofrecen. Siempre... siempre nos ofrecen ayuda ante la creativa pregunta. No-te-ofrecen-solución a la respuesta, no se hace cargo nadie. Vuelven esas sensaciones agudizantes para que recuerdes que estuvieron entre tus dedos, que estuvieron con sus dedos, los que me están llevando a escribir estas letras que se hacen palabras como pasa ser una hoja de un arbol, a una hoja del viento. Pasan a ser palabras las letras. Pasan las cosas que hoy vuelven en sensaciones. Pasan las horas que contas, agrupas en tiempo, que agrupas de aguante, de sensaciones que no es que estuvieron, las sensaciones no estuvieron. Las sensaciones no, estuvieron. Las sensaciones estan. Están siendo. Es tan triste.